diciembre 4, 2013

El Obelisco des Born y el 9 DE JULIO

En nuestra ruta por los monumentos de Menorca, nos dirigimos hasta el núcleo urbano de Ciutadella para visitar el Obelisco que ocupa el centro de la emblemática Plaça des Born, un monumento solemne erigido en memoria de aquellos que entregaron sus vidas por defender en el pasado la ciudad que hoy tanto amamos, al que … Ver más

En nuestra ruta por los monumentos de Menorca, nos dirigimos hasta el núcleo urbano de Ciutadella para visitar el Obelisco que ocupa el centro de la emblemática Plaça des Born, un monumento solemne erigido en memoria de aquellos que entregaron sus vidas por defender en el pasado la ciudad que hoy tanto amamos, al que nos acercamos con el máximo respeto a fin de revelar un funesto capítulo de nuestra historia y en recuerdo de aquellos que no deben ser olvidados.

Es en este lugar donde cada 9 de Julio se conmemora en Ciutadella de Menorca el asalto turco que se sufrió en el año 1558. Quince mil hombres capitaneados por Mustafá Piali atacaron y saquearon la ciudad tras nueve días de asedio con artillería, llevándose a más de tres mil ciudadelanos como esclavos y degollando a otros muchos, tantos que la sangre llegaba hasta el puerto, cuentan algunos. Aquellos trágicos acontecimientos se recuerdan todavía como “s’Any de sa Desgràcia” (el Año de la Desgracia).

Para preservar la memoria histórica, desde el año 1852 se instituyeron los actos conmemorativos que se repiten cada 9 de Julio en Ciutadella. Hoy en dia ya son una tradición para enaltecer la heroicidad y resistencia hasta la muerte de los habitantes de la ciudad y sus profundos valores.

En los actos de cada 9 de Julio se lee pública y solemnemente el Acta de Constantinopla en el pleno del ayuntamiento de Ciutadella, se deja una corona de flores a los pies del obelisco de la plaza des Born y se celebra una misa de exequias en la catedral en memoria de los muertos para alabar la resistencia e identificación colectiva.

Acta ConstantinoplaEl Acta de Constantinopla está datada el 7 de octubre de 1558, aunque no se tuvo constancia de ella hasta 1620. La redactó Pere Quintana en un calabozo de Estambul, a petición del gobernador Bartomeu Argimbau también prisionero. Los dos formaban parte del grupo de personas que habían sido capturadas durante el asalto y llevadas contra su voluntad al otro extremo del Mediterráneo. En el Acta, describe la llegada a las costas de Menorca el 30 de Junio de 1558 de una flota otomana formada por 140 navíos, galeras en su mayoría.

El gobernador Arguimbau ordenó fortificar Ciutadella para prepararse para el asedio pero los 24 cañones de los invasores consiguieron abrir una brecha en las murallas y entraron en Ciutadella el 9 de Julio. A lo largo de tres días, los turcos quemaron archivos, mataron a más de mil personas, profanaron iglesias, destruyeron casas, martirizaron y colgaron a la Abadesa de Santa Clara, Àgueda Ametller.

El obelisco que domina el centro de la señorial plaza des Born se erigió ya en el siglo XX, colocándose su primera piedra en el año 1857 durante una ceremonia solemne y según se dice, sobre unas monedas acuñadas en el año 1558. Con sus 22 metros de altura y cercano al puerto que se defendió, el monumento del obelisco es conmemorativo en homenaje y recuerdo de la defensa de los hombres y mujeres de la ciudad, de su coraje y del sufrimiento de los habitantes de Ciutadella de 1558. Desde entonces, las cuatro placas de mármol colocadas en la base del obelisco rezan;

“PRO ARIS ET FOCIS HIC SUSTINUIMUS USQUE AD MORTE”
                                                          (“Aquí resistimos por el altar y el hogar hasta la muerte”)

 

Imágenes; Autos Vivó / www.menorca.org