El otro día comenzamos nuestra ruta por iglesias por el arte sacro menorquín en la…
Ruta por iglesias y capillas menorquinas III
En la Parte I y Parte II de nuestra ruta por iglesias y capillas menorquinas hemos explorado a fondo la arquitectura e historia religiosa de Mahón. Ahora es el momento de abandonar la capital y emprender la ruta hacia el oeste con tu coche de alquiler en Menorca. Aunque tu primera parada no va a … Ver más
En la Parte I y Parte II de nuestra ruta por iglesias y capillas menorquinas hemos explorado a fondo la arquitectura e historia religiosa de Mahón. Ahora es el momento de abandonar la capital y emprender la ruta hacia el oeste con tu coche de alquiler en Menorca. Aunque tu primera parada no va a tardar mucho en llegar…
Basílica des Fornàs de Torelló
Justo al salir de Mahón, en la carretera de San Clemente-Mahón (el llamado Camí de Torelló) encontraremos unos de los restos cristianos más antiguos que quedan en Menorca.
La basílica des Fornàs de Torelló está datada del siglo VI d.C., la época en que el ejército bizantino de Justiniano conquistó las Islas Baleares.
Orientada de este a oeste, la basílica tiene planta rectangular con un precioso pavimento de mosaico y tres espacios claramente diferenciados:
- Un ábside rectangular en el que queda la base del altar, con una curiosa decoración de racimos de uvas (símbolo de la vida) y pavos reales.
- La nave, para los fieles, decorada con figuras geométricas y representaciones de aves.
- El espacio entre la nave y la cabecera, en el que destacan dos leones enfrentados con una palmera, que podría ser el árbol de la vida.
Iglesia de Sant Climent
Cogiendo la Me-12 desde Mahón con tu coche de alquiler en Menorca, llegarás rápidamente a Sant Climent, un lugar en el que merece la pena detenerse.
Donde hoy se levanta este pequeño pueblo, que no llega a los 1000 habitantes, hubo en los siglos XIII-XIV una capilla, dependiente de la parroquia de Mahón. Esta finca se llamaba Mussuptà, y la población estaba dispersa. La propia finca se dispersó en diversos propietarios, que en el siglo XVII decidieron agruparse para construir una nueva iglesia.
Esa iglesia se la dedicaron a San Clemente, y fue reconstruida en el siglo XIX en estilo neogótico. Entorno a ella fue proyectado y edificado el actual pueblo de Sant Climent, hacia 1850, con la idea de agrupar a toda esa población dispersa. ¡Una interesante historia que merece una visita!
Y, tras la visita, de nuevo a tu coche de alquiler, a seguir recorriendo Menorca hacia el oeste. Próxima parada: ¡Alaior y Ferreries!